En Cuba al llegar cada 8 de marzo ya es tradición dedicar un espacio en los centros laborales y de estudio a homenajear a las féminas, a través de disimiles maneras, que van desde la entrega de una flor, una postal, un poema, una pequeña actividad festiva hasta el mejor regalo que es el reconocimiento a la ardua labor que desempeñan a la par de los hombres, a pesar de su doble condición de madre y mujer.
Ese día en cada rincón del país se recuerda a un grupo de obreras, que ofrendaron sus vidas en la huelga textil en Nueva York en 1857 exigiendo mejores condiciones laborales, razón por la que en 1910 en la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague, Dinamarca, las dirigentes Clara Zetkin, Alejandra Killanty y Kate Dunker, propusieron este día como fecha conmemorativa de las luchas de las mujeres.
Sobran las razones para que en cada fémina se multiplique, el deseo de dar soporte y fomentar la presencia de mujeres emprendedoras y profesionales del ámbito artístico, social, cultural, económico, creativo e innovador en la sociedad.
Cuba es un ejemplo de ello y se ha demostrado a lo largo de la historia, a través de la incorporación de la mujer en actividades vinculadas a la producción de alimentos y los servicios, su presencia en el servicio militar activo de manera voluntaria para defender la patria y su disposición para prestar asistencia en diferentes ámbitos y en cualquier país del mundo que lo necesite.
No se puede dejar pasar este día sin hacer referencia a su papel protagónico dentro de las organizaciones políticas y de masas, en labores preventivas dentro de su radio de acción, en jornadas de limpieza y embellecimiento ante la llegada de cada efeméride de gran trascendencia histórica y en el trabajo por cuenta propia, por solo mencionar algunos ejemplos.
Ellas también se suman incondicionalmente a la campaña de lucha la eliminación de vectores como el mosquito Aedes Aegypty que en los últimos tiempos ha desatado pandemias en diversas partes del mundo como el Dengue, el Chicungunya, ahora el Zika y fiebre amarilla .
Considero que la mujer cubana esta en condiciones de continuar su papel protagónico en el avance del nuevo modelo económico que se contruye y al que aspiramos todos, rompiendo trabas mentales para que puedan insertarse en un trabajo competente con una nueva forma de gestión, pues así lo han demostrado con el nivel elevado de instrucción y de calificación profesional alcanzado y también en su encomiable labor en el trabajo por cuenta propia.
Por todo eso y mucho más llegue a todas las mujeres de Cuba y el mundo y en especial a las que se encuentran en otras naciones prestando ayuda solidaria las más sinceras felicitaciones en este 8 de Marzo “Día Internacional de la mujer”, en nombre del colectivo de esta Redacción digital del occidente cubano.
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