Este Primero de Mayo no será diferente

Cuando tan solo nos separan días para el Primero de Mayo nos viene a la mente jornadas anteriores en la que toda Cuba celebrara el Día Internacional de los Trabajadores, una jornada de júbilo en la que siempre estuvo presente el Líder Histórico de la Revolución Cubana  Fidel Castro junto a su pueblo, guiándolo y apoyándolo en sus reclamos por una patria libre e independiente. Cuesta pensar que en esta oportunidad no estará entre nosotros físicamente.

Pero este  Primero de Mayo no será diferente, pues su vínculo permanente con el movimiento sindical y los trabajadores, sus ideas, su legado y su figura serán enaltecidas por cada cubano, a modo de homenaje y  como muestra de apoyo a la Revolución y al legado de los líderes sindicales que lucharon por las causas que hoy defendemos.

Con la Unidad como principal fortaleza el Día del Proletariado Mundial estará dedicado a los jóvenes, en los que Fidel puso siempre todas sus esperanzas para dar continuidad al proceso de actualización del modelo económico-social,  que por decisión soberana hemos elegido, enfocado a desarrollar el país y el bienestar del pueblo y en el que los obreros juegan un papel protagónico.

Teniendo en cuenta que la unidad ha sido el principio que nos ha conducido al triunfo desde 1959  hasta la fecha, debe ser ahora  más que nunca, la clave, para en la  actual coyuntura internacional multiplicar el reclamo por el cese del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba y demandar la devolución del territorio de la Base Naval de Guantánamo ilegalmente ocupado a nuestro país.

El aniversario 55 de la Unión de Jóvenes Comunistas, los 50 años del asesinato del Che en Bolivia y la victoria de Playa Girón, serán otras motivaciones por las que este Primero de Mayo saldremos a desfilar, a ondear nuestra bandera,  proclamar nuestra solidaridad con los pueblos que en el mundo luchan contra las políticas discriminatorias aplicadas en el ámbito laboral y ratificar la firme convicción que, con nuestros propios esfuerzos y probada capacidad de lucha y victorias, haremos frente a los retos de la economía.

De igual manera estamos cumpliremos con el sagrado juramento que ante el Concepto de Revolución mayoritariamente refrendó nuestro pueblo y ratificamos nuestra posición solidaria  con la Revolución Bolivariana y el pueblo venezolano en su lucha por la soberanía y autodeterminación.